
El alcalde de Medellín, Daniel Quintero Calle, acudió al pedido de “presión social” hacia los concejales, para que los corporados que negaron el proyecto de venta de acciones de UNE, lo puedan aprobar en una nueva presentación del acuerdo al Concejo del Distrito.
Quintero aseguró que, “Solo con la presión ciudadana se puede lograr que el concejo vote como tiene que votar y es por la ciudad y no contra Quintero”.
A pesar que, los concejales del partido Centro Democrático aseguraron que no recibieron el compromiso por parte del alcalde de invertir el dinero de la venta en los estratos 1, 2 y 3 para lograr reducción de servicios públicos, reconexión de los mismos y conexión a internet, el alcalde dijo que el dinero se invertiría en congelar el costo de factura de EPM y en entrega de computadores.
Si esto es así, ¿dónde está el teléfono roto?
Los concejales de oposición, afirman que no hay un documento escrito donde se deje claro la inversión de los 2,8 billones de pesos que costarían las acciones de UNE. Por lo que la desconfianza persiste.