Conforme avanza el debate de la reforma tributaria en el Congreso de la República, se ha planteado cárcel para los evasores de impuestos en el país, con penas de prisión que irían desde 4 a 9 años. Condenas que se impondrán a quienes oculten bienes por más de 1.000 millones de pesos, que no paguen impuestos desde 100 millones de pesos o para quienes hayan evadido impuestos en tres ocasiones.
“El primero paga, el segundo paga con una multa adicional y la tercera vez va a la cárcel” explicó el ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo, en referencia a los tres momentos de la pena por la evasión.
Luis Carlos Reyes, director de la Dian, señaló que las personas tendrían una primera oportunidad, pero si reinciden asumirán la multa y la privación de su libertad. Si llegará a suceder por una tercera vez, irían a la cárcel.
«Aquél que omita activos o declare un menor valor o declare pasivos inexistentes, con el propósito de defraudación o evasión por un monto igual o superior a 1.000 salarios mínimos legales mensuales vigentes. El valor de los activos omitidos o de los declarados por un menor valor será establecido de conformidad con las reglas de valoración patrimonial de activos del Estatuto Tributario y el de los pasivos inexistentes por el valor por el que hayan sido incluidos en la declaración tributaria. Si el valor fiscal de los activos omitidos o el menor valor de los declarados o del pasivo inexistente es superior a 2.500 salarios mínimos, pero inferior a 5.000, las penas previstas se incrementarán en una tercera parte; y en los eventos en que sea superior a 5.000 salarios mínimos se incrementarán en la mitad», indica la propuesta.
