A sus 5 años, Luan Leiva pidió a sus padres que adelantaran su proceso para cambiar el género en el documento. La partida de nacimiento corregida llegó cuando el niño tenía 4 años y medio y en la actualidad es reconocido legalmente como varón.
La familia de Luan buscó ayuda de un terapeuta para evaluar el comportamiento de su hijo y recibir orientación en el proceso de acompañamiento del niño en su identidad de género, además del miedo que manifestó la madre por el momento en que ´Lu´ se diera cuenta de las diferencias físicas entre su cuerpo y el de su padre.
“El niño empezó a definir su género desde los 2 años, como nosotros ya teníamos una hija pensamos que lo esperable era que la siguiera, que la imitara, pero él era todo lo opuesto, yo le ponía colitas y se las arrancaba, le ponía un vestido y hacía lo mismo. Cuando empezó a hablar más me decía ponme ropa, esto no”, detalló la madre de Luan.
Con el tiempo, empezaron a hacer el cambio gradualmente, respondiendo a sus preguntas e incertidumbres a medida que reconocían a Luan como un niño, después continuaron por sacar la ropa del armario y de esta manera dieron paso a una nueva etapa en la vida de ´Lu´ como su verdadera identidad de género.
