
Una tragedia se registró este martes a las 2:50 de la madrugada en Crimea. La represa de Kakhovka fue bombardeada y destruida, afectando por completo el funcionamiento de la central hidroeléctrica que alimenta a toda la península de Crimea con agua dulce. La región anexada por Rusia sufre una de sus afectaciones más graves en medio del conflicto bélico entre Rusia y Ucrania.
No faltaba mucho para que la península de Crimea resultara afectada después de un año de intensos ataques de Rusia a Ucrania, puesto que fue una región en disputa que Rusia se anexó en 2014. Ahora, las acusaciones entre ambos países para definir al responsable del atentado son latentes, y entre ambos se echan la culpa.
También le podría interesar:
La represa se desbordó por completo, bajando el caudal que alimentaba a la región, inundando aldeas y perdiendo el suministro de agua dulce. El Ministerio de Defensa de Ucrania anunció que hace presencia en la zona ayudando a las personas afectadas a evacuar, puesto que, según su información, hay campos de minas explosivas bajo el agua que pueden generar más daño.
El Gobierno ucraniano acusó directamente a Rusia, indicando incluso la ‘imposibilidad’ de atacar la región. O así lo expresó el presidente ucraniano Volodímir Zelenski ante la OTAN, diciendo que “Rusia ha estado controlando la represa y toda la central hidroeléctrica de Kakhovka durante más de un año. Es físicamente imposible hacerlo estallar de alguna manera desde el exterior, mediante bombardeos”.
- Asamblea Nacional ConstituyenteFoto Cortesía: Presidencia. «(…)será entregada una papeleta para convocar la asamblea nacional constituyente en las próximas elecciones.» Con estas palabras, anunció el presidente Gustavo Petro, a través de su cuenta de X, que buscarán una Asamblea Nacional Constituyente. Ante los… Lee más: Asamblea Nacional Constituyente
La agencia rusa TASS informó que para el Ministerio de Defensa ruso el atentado se trató de un “sabotaje deliberado por parte de Ucrania”. Acusaron, así, a Ucrania de cometer un ataque con graves consecuencias ambientales y con la intención directa de privar a Crimea del suministro de agua.
Entre tanto, ninguna de las dos naciones se responsabiliza del acto, y ambas sufren las consecuencias del mismo. Aproximadamente 80 aldeas sufren riesgos inminentes de inundación, por lo que los residentes, tanto rusos como ucranianos, podrán perder sus viviendas y sus suministros de alimento agrícola.