Cortesía: prensa Angélica Lozano / Presidencia¿Revolución laboral a la vista?
El martes 28 de mayo de 2025, el país presenció un avance decisivo en la reforma laboral. La Comisión Cuarta del Senado dio luz verde en tercer debate al proyecto que busca transformar profundamente las condiciones de trabajo en Colombia. Después de más de nueve horas de discusiones, once votos a favor frente a dos en contra definieron el futuro inmediato de esta iniciativa, que ahora espera ser discutida en la plenaria del Senado antes del 20 de junio, fecha tope para su aprobación definitiva y posible sanción presidencial.
La aprobación no fue casual. La senadora Angélica Lozano, presidenta de la Comisión Cuarta y principal promotora de la propuesta, resaltó los cambios fundamentales que incluye la reforma. Modificaciones como la jornada nocturna que iniciará a partir de las 7:00 p.m. y un recargo del 100% para el trabajo en domingos y festivos marcan una pauta inédita en la legislación laboral colombiana. Lozano fue clara al pedirle al presidente Gustavo Petro que deje atrás el “embeleco político de la consulta popular”, aludiendo a la insistencia del Gobierno para someter esta reforma a un mecanismo de participación ciudadana, idea que el Senado ya descartó el pasado 14 de mayo.
Este proyecto, que consta de 75 artículos, no es un capricho unilateral del Ejecutivo. Nació de una ponencia alternativa respaldada por una coalición plural de partidos políticos, reflejando un consenso que va más allá del Gobierno. La senadora Lozano defendió con firmeza el papel del Congreso diciendo: “La Comisión Cuarta le cumple a Colombia y entrega una reforma laboral moderna, estructural, que transforma de manera significativa las reglas del trabajo. Esta será una ley laboral en junio y el presidente tiene que dejar su embeleco político de la consulta popular. Zapatero a sus zapatos: el Gobierno a gobernar, el Congreso hace una buena reforma laboral”. Para ella, no hay excusas para paralizar este avance con campañas paralelas.
Con este paso, la esperanza de una legislación laboral que responda a las realidades actuales se fortalece, aunque los desafíos no terminan. Queda por ver si la plenaria del Senado confirmará este consenso y cómo reaccionará el Ejecutivo frente a un texto que pretende modificar el tejido laboral del país. ¿Podrá la reforma superar las resistencias políticas y sociales que aún la acechan? A partir del 20 de junio, Colombia buscará respuestas mientras se define el rumbo del trabajo y la justicia laboral.
