UN APAGÓN GLOBAL SACUDE A CHATGPT
Un silencio abrupto que estremeció el mundo digital.
Este martes 10 de junio de 2025, desde la madrugada en Estados Unidos hasta pasado el mediodía en Colombia, la inteligencia artificial ChatGPT sufrió una falla monumental que dejó a millones sin conexión durante más de diez horas.
La interrupción comenzó alrededor de las 2:45 a.m. hora del Este de Estados Unidos, cuando las primeras alertas aparecieron en plataformas que monitorean servicios en línea. Usuarios en diversas partes del mundo reportaron la imposibilidad de acceder a la popular herramienta de OpenAI, la empresa estadounidense detrás del sistema. No solo ChatGPT se vio afectado: otras aplicaciones como el generador de imágenes Sora también experimentaron parálisis.
Este apagón trascendió más allá de un simple mal funcionamiento tecnológico. Personas, profesionales y negocios que dependen diariamente de ChatGPT para redactar, investigar o gestionar atención al cliente vieron trastocados sus planes de forma abrupta. Los medios internacionales apuntaron a una inestabilidad fluctuante durante la jornada, caracterizada por interrupciones intermitentes que erosionaron la productividad y provocaron incertidumbre. OpenAI, por su parte, aún no ha esclarecido la causa oficial; sin embargo, fuentes apuntan a una posible sobrecarga del sistema ante la creciente demanda global de la plataforma.
Frente a esta crisis, los equipos técnicos de OpenAI actuaron con urgencia. Continuaron los esfuerzos para restaurar el servicio, que comenzó a normalizarse alrededor de las 13:00 horas, devolviendo el acceso a usuarios en Colombia y el resto del planeta. La compañía aseguró que se mantiene en constante monitoreo para evitar que un episodio semejante vuelva a suceder y que la confianza en su infraestructura recupere firmeza.
En un escenario donde la dependencia de la inteligencia artificial se profundiza, la caída exhibe la fragilidad detrás de la comodidad digital. Mientras tanto, expertos rescatan que existen alternativas robustas que ya comienzan a hacerse espacio. Herramientas como Google Gemini, valorizada por su capacidad de integrar información en tiempo real, y Grok, creada por la innovadora compañía xAI del empresario Elon Musk, emergen como opciones viables para aquellos que no pueden permitirse interrupciones.
El 10 de junio deja una pregunta urgente: ¿podrá la inteligencia artificial sostener el ritmo vertiginoso de quienes la necesitan, o estamos ante la advertencia de un sistema que aún no está preparado para la escala mundial que ha alcanzado?
