📸 Imagen cortesía D.R.A
¿Fracaso a la vista?
Este lunes 15 de septiembre de 2025, el Gobierno de Estados Unidos anunció la descertificación de Colombia en la lucha antidrogas.
El Departamento de Estado emitió un pronunciamiento oficial donde señala que, en los últimos doce meses, Colombia no ha cumplido de forma significativa con sus compromisos internacionales contra el narcotráfico. A pesar de que la ayuda financiera y de seguridad se mantendrá, EE. UU. advirtió que el escaso avance y el incumplimiento de acuerdos bilaterales exponen la fragilidad de la política antidrogas colombiana. Esta decisión ha encendido las alarmas en Antioquia, región clave para el combate al crimen organizado y los cultivos ilícitos.
Desde Medellín, el alcalde Federico Gutiérrez, quien en días recientes estuvo en Washington buscando evitar justamente esta sanción, manifestó su profunda preocupación: “No es una buena noticia para el país; estuvimos en Estados Unidos buscando apoyo para fortalecer la lucha antidrogas y evitar esta sanción”. El gobernador de Antioquia, Andrés Julián Rendón, fue aún más directo en sus críticas en redes sociales: “La descertificación es una radiografía del fracaso de la paz total”, afirmó, responsabilizando al presidente Gustavo Petro por “contemporizar con criminales” y alertando sobre un retroceso de casi veinte años en la seguridad nacional.
Rendón reclamó, además, la necesidad urgente de reactivar la aspersión aérea con glifosato, una medida controvertida pero que, según él, representa “una herramienta imprescindible para enfrentar el avance descontrolado de los cultivos ilícitos”.
Lo que está claro es que la descertificación no solo es un golpe diplomático, sino un termómetro inquietante sobre la eficacia de la política antidrogas en Colombia. ¿Podrá el Gobierno nacional superar esta crisis y recomponer una estrategia que hoy parece naufragar? Mientras tanto, Antioquia y el país esperan respuestas y resultados.