📸 Imagen cortesía AFP
¿Última danza de un gigante?
Este martes 11 de noviembre de 2025, en la ciudad de Riad, Cristiano Ronaldo, el veterano y emblemático capitán de la selección portuguesa, selló con honestidad un capítulo que estaba en la mente de muchos: el Mundial de 2026 será su despedida oficial del fútbol internacional.
Con 40 años a cuestas y vistiendo hoy la camiseta del Al-Nassr saudí, Ronaldo ofreció esta revelación en un foro dedicado al turismo, dejando clara su determinación: “Definitivamente sí. Tendré 41 años y creo que será el momento”. La sentencia resonó con la fuerza de quien sabe que el tiempo no perdona, aunque al mismo tiempo su cuerpo y espíritu siguen compelidos a la lucha. “Estoy disfrutando este momento”, agregó, reconociendo la dificultad intrínseca de hablar del final, pero también la ilusión de mantenerse competitivo y ser aún un recurso vital para su selección.
Cristiano no dejó pasar la oportunidad para subrayar que su retiro total del fútbol profesional permanece indefinido, aunque el horizonte se perfila cercano: “Cuando digo pronto, probablemente signifique uno o dos años más”. A sus espaldas, una carrera colmada de éxitos: cinco Balones de Oro, récords goleadores que desafían el tiempo y la historia, y, sobre todo, la gloria conquistada con Portugal, que incluye la Eurocopa de 2016 y la Nations League 2019.
Sin embargo, el Mundial, esa gran cita que corona sueños y leyendas, sigue siendo su última asignatura pendiente. El eco de Alemania 2006, cuando Portugal quedó fuera en semifinales frente a Francia, aún se siente presente en su memoria.
Mientras tanto, la selección portuguesa no tiene asegurada aún su plaza para jugar en la Copa del Mundo 2026. Matemáticamente depende de sí misma y se jugará buena parte de su pasaje en el próximo duelo ante Irlanda.
¿Será este último baile de Cristiano una despedida triunfal o una reflexión sobre la fugacidad del talento en el escenario global? Por ahora, la incertidumbre y la esperanza conviven, mientras uno de los mayores íconos del deporte se prepara para colgar la camiseta internacional.
El adiós parece inevitable, como lo es el paso inexorable del tiempo. Pero la historia del “7” portugués seguirá escribiéndose, hasta el último minuto y más allá. ¿Podrá la leyenda cerrar con la corona que aún le falta? Solo el futuro lo dirá.
