Una madre del Medio Oeste animó a su hija preadolescente a abrir una cuenta de Instagram con el objetivo de convertirla en una persona influyente en línea. Actualmente, el 92% de sus seguidores son hombres adultos.
La niña, aspirante a bailarina y ahora en la escuela secundaria, pudo conectarse con otros jóvenes influyentes al lanzar su página hace tres años, lo cual le permitió conseguir trabajos como modelo y recibir numerosos obsequios de marcas de diseñadores reconocidos.
Según el informe de The Wall Street Journal, se resalta la fragilidad de los menores en entornos digitales y la insuficiencia de métodos efectivos para resguardarlos de los depredadores en línea.
En respuesta a tal inseguridad, plataformas digitales como Instagram mencionan que reforzarán sus políticas de seguridad y monitoreo, especialmente en las cuentas que están asociadas a menores de edad.
