
El expresidente de Colombia Álvaro Uribe Vélez fue una de las personas mencionadas por Salvatore Mancuso en sus audiencias en la JEP. Los aportes del extraditado salpicarían al expresidente, acusándolo de recibir beneficios de los paramilitares y de ser actor indirecto en actos criminales realizados por ellos.
En la cuarta sesión de la audiencia, Mancuso indicó que los paramilitares apoyaron, entre otras, la campaña presidencial de Uribe. Estos apoyos habrían sido mediante financiamiento y constreñimiento al elector. Además, indicó que, fungiendo ya como presidente, Uribe Vélez habría quitado la protección al alcalde de El Roble, Sucre, ante amenazas en su contra.
El expresidente, a través de sus redes sociales, subió un video y un comunicado respondiendo a las acusaciones realizadas por Mancuso. En estas comunicaciones, indicó que su gestión desde que llegó a la presidencia se centró en proteger a los más de 300 alcaldes amenazados por grupos armados. Incluso, explicó que sus escoltas en ese momento se duplicaron.
En cuanto a los apoyos a su campaña, el expresidente indicó que “Hace años el señor Mancuso expresó que había ayudado con recursos. Se le contestó en esa época. Nadie tenía autorización de pedir ni de recibir esos recursos. Si el hecho se dio, se los robaron”.
Además, indicó que su gobierno fue el que tomó la decisión de extraditar tanto a Mancuso como a otros de sus compañeros paramilitares en 2008. Por esto, dijo, fue advertido de posibles venganzas que podría sufrir a lo largo de su vida. “Procederé a denunciar al señor Mancuso ante la justicia colombiana y ante la justicia de los Estados Unidos donde vive”, sentenció.