Foto: @POTUS
Este miércoles se llevó a cabo el primer encuentro entre el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, con el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu. En la reunión, Biden reforzó el apoyo incondicional de Estados Unidos a Israel en la guerra que se lleva a cabo con el grupo Hamas en la Franja de Gaza.
Ambos mandatarios, además, advirtieron que no tendrían reparos en comenzar una nueva guerra, y que la ganarían, contra cualquiera que se aprovechara del estado actual de Israel para atacar. Por ello, Biden enfatizó en que “seguiremos respaldando a Israel mientras trabaja para defender a su pueblo. Continuaremos trabajando con usted y nuestros socios en toda la región”.
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A su llegada, el presidente de los Estados Unidos suscribió la versión de Israel sobre lo ocurrido este martes, 17 de octubre, con el Hospital Bautista de Gaza, que fue bombardeado, asesinando a cientos de personas. Biden, entonces, apoya la idea de que la culpa recae en Hamas, puesto que uno de sus cohetes habría fallado, impactando el lugar.
Por otro lado, el mandatario norteamericano anunció este miércoles que Estados Unidos proveerá “100 millones de dólares en asistencia humanitaria para el pueblo palestino en Gaza y Cisjordania”, según afirmó en su cuenta de X (antes Twitter). La información fue confirmada por el Departamento de Estado.
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Esta ayuda humanitaria beneficiaría “a más de un millón de personas desplazadas y afectadas por conflictos con agua potable, alimentos, apoyo de higiene, atención médica y otras necesidades esenciales”, de acuerdo con la información presentada.
Por último, una de las medidas que también serán admitidas por el Gobierno de Estados Unidos tiene que ver con un bloqueo a Hamas, por medio de la intervención de “diez miembros, agentes y facilitadores financieros clave del grupo terrorista en Gaza y otros lugares”.
