Foto: @celtics
Las finales de conferencia de la NBA comenzaron con un partidazo que tuvo de todo: remontadas, empate en la bocina y definición en el tiempo extra. Los Boston Celtics aprovecharon su localía y vencieron a los Indiana Pacers en el primer juego de la final del Este. Esta noche comienza la serie del Oeste, entre los Dallas Mavericks y los Minnesota Timberwolves.
Los Celtics recibieron a los Indiana Pacers en el TD Garden de Boston para disputar el primer partido de las finales de la Conferencia del Este de la NBA. Los locales salieron enchufados y rápidamente sacaron una ventaja que parecía el augurio de un baile: 12 – 0. Sin embargo, los visitantes cambiaron el chip con el ingreso de algunos suplentes y terminaron el primer cuarto con una diferencia mucho menor, 34 – 31. Los Pacers sostuvieron el impulso y se quedaron con la victoria del segundo cuarto, para irse al descanso con empate a 57 puntos. Había partido.
En el tercer cuarto los Celtics mostraron su mejor cara y gracias a Tatum, Holiday y Brown se pusieron arriba 90 – 77, pero los Pacers, una vez más, cambiaron la marcha y terminaron el parcial 93 – 94 abajo gracias a un impresionante triple de Halliburton sobre la bocina. El último cuarto fue más luchado y fue en el que menos puntos se anotaron. Los de Indianápolis culminaron su remontada y se pusieron arriba por 5 puntos, 115 – 110, a falta de dos minutos. Hubo errores de lado y lado y el marcador, a falta de 8 segundos, iba 117 – 114 para los Pacers. Allí apareció, de manera milagrosa, Jaylen Brown para empatar el resultado con un triple que parecía imposible y llevar el juego al extra tiempo, en el que los locales fueron más precisos, tanto en defensa como en ataque, y se quedaron con la victoria por 133 – 128. Ventaja, Celtics.
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Esta noche, a partir de las 7:30 p. m., los Dallas Mavericks visitan al equipo sensación de la temporada, los Minnesota Timberwolves. Tras eliminar a los Denver Nuggets, los de Minneapolis, liderados por Anthony Edwards, buscarán el título de la conferencia ante los texanos, que esperan que Doncic e Irving los lleven a jugar por el anillo.
