Foto: Nicolás Petro (@nicolaspetroB)
Este lunes festivo se encendió de nuevo la polémica en torno a la investigación de la Fiscalía en contra de Nicolás Petro Burgos, hijo del presidente Gustavo Petro, por los delitos de lavado de activos y enriquecimiento ilícito, en consonancia con un supuesto financiamiento irregular a la campaña presidencial de Gustavo Petro.
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Los comentarios punzantes hacia el presidente y su hijo se reactivaron este lunes festivo, 21 de agosto, después de que el presidente indicara a través de su cuenta de X (anterior Twitter) que había visitado a su hijo Nicolás en su residencia en Barranquilla, donde no cumple medida de aseguramiento domiciliaria, pero que no puede abandonar.
Petro Urrego contó que visitó a su hijo Nicolás, y añadió que “Como padre siempre tendrá mi apoyo y mi cariño. Como presidente he respetado sin titubeos la independencia judicial. Espero una acción penal libre de agendas políticas y de total sujeción al debido proceso y los fallos judiciales”. Esto, sin embargo, alteró a miembros de la oposición del Gobierno, como el senador Miguel Uribe Turbay, quien expresó que esta visita “altera el proceso y pone en riesgo la investigación”.
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Frente a las dudas que surgieron de la reunión entre padre e hijo investigado, Nicolás Petro decidió pronunciarse también. El hijo del presidente habría demostrado con palabras que no tomaría acciones para defender a su padre ante una posible culpabilidad, y que colaboraría con la justicia. Sin embargo, su pronunciamiento trató de aclarar una buena relación entre ambos y evitó ser centro de polémica.
“Quiero informales que hoy recibí la visita de mi papá, nos reunimos unos minutos en familia, estaba Laura, mi mamá y unos primos maternos”. Además, según Nicolás Petro, hablaron de su hijo en camino: “Hablamos de Luka Samuel y de la importancia de él en nuestras vidas”. A esto, añadió que “No todo gira en torno a la política”.
