Dos puentes metálicos en sector Naranjal, son la solución provisional que se plantea desde el ministerio de Transporte, para dar solución a la problemática de comunicación vial que se vive entre Bogotá y el Llano luego de la avalancha que se presentó en la madrugada de este martes 18 de julio, en la vereda Naranjal del municipio de Quetame, Cundinamarca y que dejó como saldo 15 personas muertas, seis más heridas y se presume que aún 13 continúan desaparecidas.
“Tenemos prevista una habilitación progresiva de la calzada, en los dos sentidos. En la próxima semana, esperamos hacia el próximo viernes, tener ya habilitado un sentido de circulación alterno, que nos permitirá conectar Villavicencio – Bogotá y Bogotá – Villavicencio, con paso alternado.” Afirmó el ministro de Transporte, William Camargo Triana.
Y es que la magnitud de la avalancha fue tal, que de acuerdo con el gobernador del Meta, Juan Guillermo Zuluaga, la fuerza del agua generó daños estructurales a los dos puentes de la vía: el puente Naranjal y el puente que está en el sentido Bogotá – Villavicencio.
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De acuerdo con el ministro Camargo, en una semana tendrían ya paso en el corredor alterno para los dos sentidos y en dos semanas se restablecería la operación normal con restricciones de capacidad.
“Se va a elaborar el día de hoy un protocolo con el PMU municipal, departamental y la concesión, para permitir el paso de las personas de Guayabetal, Cáqueza y Quetame, hacia algunos sitios donde tienen citas y atenciones prioritarias.” Manifestó el gobernador de Cundinamarca, Nicolás García, quien celebró el anuncio de que el paso podrá restablecerse en una semana y no en tres, como se había afirmado inicialmente.
