📸Cortesía: imagen creada con Inteligencia Artificial
¿SEGURIDAD EN LOS CIMIENTOS O UN MURO DE PAPEL?
A partir del 1 de julio de 2025, todas las nuevas viviendas en Colombia deberán contar con el llamado seguro Anti-Space o seguro decenal. Esta medida, que cubrirá riesgos estructurales durante los primeros diez años desde la entrega, busca evitar tragedias como el colapso del edificio Space en Medellín en 2013, una cicatriz aún abierta en la memoria colectiva.
La medida fue confirmada oficialmente por la Federación de Aseguradores Colombianos (Fasecolda) el 25 de junio y representa la culminación de un proceso iniciado con la Ley de Vivienda Segura (Ley 1796 de 2016), impulsada justamente tras aquel desastre. La obligatoriedad se había aplicado poco a poco: empezó en ciudades como Bogotá y Medellín, avanzó a Barranquilla, Cali y otras principales urbes, y ahora, con esta decisión, obliga a las constructoras en los 1030 municipios del país a garantizar esta protección a los compradores.
El propósito es claro: proteger a los nuevos propietarios de daños graves que puedan comprometer la estructura de sus hogares, generando confianza y mitigando riesgos financieros y emocionales en un mercado donde la informalidad y la falta de controles adecuados han sido constantes. Al respecto, Gustavo Morales, presidente ejecutivo de Fasecolda, subrayó que Con este paso el país consolida una cultura de prevención en la construcción y eleva los estándares técnicos exigidos a los constructores.
Queda claro entonces quién asume la responsabilidad y quién es el beneficiario: las empresas constructoras y promotoras deben contratar esta póliza, que se liga directamente al inmueble y no al propietario. Esto significa que futuros compradores también cuentan con esta garantía, sin excepción, durante diez años.
Sin embargo, surgen interrogantes que persisten en el aire: ¿será este seguro realmente un escudo contra las falencias estructurales, o apenas un alivio burocrático en un sector donde las sombras de la impunidad y la negligencia todavía acechan? La ciudadanía espera respuestas claras y una vigilancia rigurosa para que esta normativa no quede en letra muerta. Porque al final, más que pólizas, lo que reside en juego son las vidas y la confianza en el hogar de miles de colombianos.