📸 Imagen cortesía: Captura de pantalla. Video tomado de la cuenta de X de la Casa Blanca
¿Guerra sin testigos en el Pacífico?
Este martes 28 de octubre de 2025, la ofensiva militar de Estados Unidos contra el narcotráfico marítimo dejó un saldo oscuro y polémico en aguas internacionales del Pacífico Oriental.
El lunes 27, bajo órdenes directas del entonces presidente Donald Trump, el ejército estadounidense ejecutó tres ataques simultáneos contra cuatro embarcaciones sospechosas de traficar drogas. El resultado: 14 personas muertas y un único sobreviviente, rescatado por autoridades mexicanas en coordinación con el Comando Sur de EE. UU. Según el secretario de Defensa, Pete Hegseth, estas “narcolanchas” pertenecían a “organizaciones terroristas designadas” y transitaban rutas conocidas de tráfico ilícito con destino a Norteamérica. La embestida forma parte de una campaña iniciada en septiembre que ya ha provocado al menos 57 muertes en trece ataques previos.
Sin embargo, la contundencia militar contrasta con la opacidad oficial. Hasta ahora, ni el Pentágono ni ningún portavoz ha presentado evidencias públicas sobre la carga ilícita o las identidades de las víctimas, un vacío que provoca desconfianza y críticas en la región. La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, expresó su descontento: “No estamos de acuerdo con estos ataques, con cómo se dan”, enfatizando el malestar diplomático que estas operaciones generan en América Latina.
Mientras tanto, la estrategia de Washington sitúa el litoral pacífico colombiano en el corazón de esta guerra sin testigos. La pregunta queda abierta: ¿pueden justificarse acciones letales en alta mar sin transparencia ni control regional? Y, sobre todo, ¿qué precio pagarán quienes quedan atrapados en esta lucha contra el narcotráfico?
La sombra de estas operaciones se extiende más allá del oleaje, provocando un vacío de confianza difícil de soslayar. El Pacífico Oriental mira ahora hacia un futuro incierto, con la voz de la justicia intentando abrirse paso entre tanto ruido y silencio.
