📸 Imagen cortesía Balón de Oro
El rey efímero del balón dorado
Este lunes 22 de septiembre de 2025, en el mítico Teatro Châtelet de París, Ousmane Dembélé, el futbolista francés que brilla con la camiseta del Paris Saint-Germain, recibió el Balón de Oro, el galardón que corona al mejor jugador del mundo. Una noche cargada de luces, aplausos y, sobre todo, reconocimientos por una temporada que lo ha elevado a la cima del fútbol mundial.
El astro galo destronó a jóvenes prodigios como Lamine Yamal del Barcelona y frente a figuras consagradas como Erling Haaland y Jude Bellingham, ambos en Real Madrid, así como a Vinicius Jr. Dembélé no solo destacó por sus goles y asistencias sino por una madurez y constancia que, según France Football —los organizadores del premio—, fueron claves para su triunfo. Su fútbol, lleno de destellos ofensivos y liderazgo, fue decisivo en los títulos nacionales e internacionales que el PSG celebró en la última temporada.
Este reconocimiento no es fruto del azar. Es la culminación de años de dedicación, disciplina y un amor profundo al deporte rey. En su discurso, Dembélé no dejó de agradecer a quienes le han acompañado en esta jornada: sus compañeros, técnicos y la afición que vibra con cada uno de sus toques. Más allá del brillo individual, el Balón de Oro luce ahora como la consagración del esfuerzo colectivo y la perseverancia.
La ceremonia, retransmitida en vivo para Colombia y el mundo, también honró a otras figuras: la española Aitana Bonmatí se llevó el Balón de Oro femenino, mientras que el Trofeo Kopa, el Yashin y el Gerd Müller reconocieron a las promesas, al mejor portero y al máximo goleador del año, respectivamente.
Ousmane Dembélé se une así a la exclusiva constelación de leyendas del fútbol y se convierte en el primer francés en alzarse con este premio desde hace tiempo. Un recordatorio de que, en la encrucijada del talento y la entrega, brotan las grandes gestas deportivas. ¿Será este el inicio de una era dorada para el futbolista parisino, o un fugaz destello en la eternidad del balón? Solo el tiempo, y los siguientes capítulos en el césped, lo dirán.