El Programa Mundial de Alimentos (PMA) ha emitido una seria advertencia sobre el riesgo inminente de condiciones catastróficas de hambre en varias regiones de Sudán el próximo año. La situación se agrava después de casi ocho meses de conflicto en el país.
Un análisis reciente de la seguridad alimentaria en Sudán revela los niveles más críticos de hambre registrados durante la temporada de cosechas, que normalmente es un período en el que hay más alimentos disponibles (de octubre a febrero). La gravedad de la situación implica que, si las agencias humanitarias no pueden acceder a la población en áreas como Jartum, Darfur y Kordofán, la hambruna podría alcanzar proporciones catastróficas.
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El Programa Mundial de Alimentos hace un llamado urgente a todas las partes en conflicto para que permitan una pausa humanitaria y un acceso sin restricciones, con el objetivo de evitar una catástrofe de hambre en la próxima estación de escasez. La crisis alimentaria en Sudán es una preocupación apremiante que requiere acciones inmediatas para garantizar la seguridad alimentaria y la supervivencia de la población afectada.
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