Imagen cortesía: Organización de las Naciones Unidas
Menos del 25% de las misiones de ayuda de la ONU en Gaza reciben la aprobación de Israel, según informó la Oficina de Coordinación Humanitaria. Paralelamente, un grupo de expertos en derechos humanos denuncia que Israel está utilizando los alimentos como armas contra los palestinos.
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Durante las dos primeras semanas de enero, solamente siete de las 29 misiones programadas para entregar alimentos, medicinas, agua y otros suministros vitales lograron llegar con éxito a sus destinos en el norte de Wadi Gaza, según declaraciones de la Oficina. La situación en la Franja es crítica, con informes que indican que algunas personas han pasado días sin comida, los niños carecen de ropa de invierno y la atención médica es escasa. En el norte de Gaza, las condiciones son aún más precarias.
De acuerdo con expertos en derechos humanos, los habitantes de Gaza representan el 80% de las personas que sufren hambruna o hambre catastrófica a nivel mundial. Estos expertos sostienen que Israel está destruyendo el sistema alimentario de Gaza y utilizando los alimentos como un medio para afectar a la población palestina, calificando esta acción como sin precedentes y señalando que está llevando a toda una población civil a una situación de hambre de manera completa y rápida.

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Desde el inicio de la ofensiva terrestre del Ejército israelí en octubre, aproximadamente el 22% de las tierras agrícolas del norte de Gaza han sido arrasadas, y se estima que el 70% de la flota pesquera de Gaza ha sido destruida. Los expertos han expresado su alarma ante el riesgo de genocidio, indicando que Israel no solo está causando muertes con bombardeos indiscriminados, sino que también está imponiendo consciente e intencionalmente altos índices de enfermedades, desnutrición prolongada, deshidratación y hambruna.