El grupo de indígenas Emberá Katío que estuvieron por un periodo de tres meses en las afueras de la Institución Educativa Héctor Abad Gómez y los alrededores del barrio Niquitao en Medellín, terminó su retorno al departamento de Chocó finalizando su trayecto en sus respectivos resguardos.
En el mes de febrero, luego de una toma a la Alcaldía de Medellín por parte de un numeroso grupo de indígenas, el alcalde Daniel Quintero Calle, les ofreció los recursos para un retorno seguro a sus resguardos. El 60 % de la población trasladada son mujeres, niños, niñas, adolescentes y jóvenes.
Los indígenas están siendo recibidos por la Unidad Nacional de Atención y Reparación a Víctimas (UARIV) y el Equipo de Atención y Reparación a Víctimas de la Secretaría de la No-Violencia, se les entregará ayudas y continuarán por medios propios; pero con recursos de pago vehicular y mular por la UARIV para llegar hasta cinco zonas del resguardo, algunos a más de ocho horas de Dokabú.
Ahora, bajo acciones interinstitucionales, se iniciará la recuperación del espacio público que fue afectado por el asentamiento indígena.
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