📸 Cortesía: Presidencia
«`html¿REFORMA PENSIONAL A TODA PRISA?
Este 28 de junio de 2025, en una sesión extraordinaria convocada en Bogotá, la Cámara de Representantes de Colombia aprobó el texto de la reforma pensional impulsada por el Gobierno de Gustavo Petro. La medida generó celebración en el Ejecutivo, mientras varios sectores del Congreso alertaron sobre irregularidades en el trámite que recuerdan el fallo adverso previo de la Corte Constitucional. Con esta votación, la iniciativa quedó lista para la revisión definitiva del alto tribunal antes de su posible entrada en vigencia.
Tras casi seis horas de debate en sesión plenaria, la votación culminó con 97 votos a favor y solo uno en contra, siguiendo la propuesta de recibir en bloque el texto que ya había sido aprobado por el Senado. Sin embargo, partidos de oposición como Centro Democrático y Cambio Radical se abstuvieron de votar, argumentando que la convocatoria “no cumplió con los requisitos legales” y advirtiendo que el proceso arrastra un nuevo vicio que podría invalidar el acto legislativo.
El presidente Gustavo Petro celebró el resultado a través de sus redes sociales: “Hemos triunfado. Que vivan las abuelas y abuelos de Colombia. Ha sido aprobada la reforma pensional. He cumplido y la Cámara de Representantes ha cumplido”, afirmó enfático. Por su parte, el ministro del Interior, Armando Benedetti, defendió que la sesión tenía como propósito “subsanar un vicio de trámite” detectado por la Corte Constitucional en 2024, cuando la iniciativa fue devuelta al Congreso tras impugnaciones que señalaban insuficiente debate en la Cámara.
No obstante, en medio del júbilo oficial, voces desde el mismo Congreso expresaron fuertes críticas. El representante liberal Juan Carlos Losada advirtió que el método elegido, aprobar el texto sin discutir artículo por artículo, reproduce el error que en su momento llevó a la Corte a tumbar la versión anterior. Para Losada, esto convierte un proceso que debería ser riguroso en una actuación formalista que erosiona la confianza ciudadana en la transparencia legislativa.
La reforma pensional, más allá de sus méritos técnicos o sociales, queda así empañada por la sombra de una tramitación acelerada y cuestionada. La incertidumbre persiste sobre si la Corte Constitucional validará esta vez el texto o si, como en ocasiones anteriores, intervendrá para exigir un debate más profundo y transparente. Mientras tanto, la ciudadanía observa con atención y expectativa los próximos pasos de un proceso que marcará el futuro de millones de colombianos.
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