📸 Imagen cortesía AFP
¡Un duelo con aroma a semifinal!
Este miércoles 24 de septiembre, en la vibrante ciudad de Manizales, el estadio Palogrande se vestirá de pasión para recibir a Once Caldas que enfrenta la última frontera hacia las semifinales de la Copa Sudamericana. Con la ventaja de 2-0, conseguida en Quito ante Independiente del Valle, el equipo colombiano tiene la misión de mantener la ventaja y sellar un sueño anhelado desde hace años.
La noche anterior, en la altura ecuatoriana, Once Caldas mostró solidez, con una defensa férrea y la guía experta de Dayro Moreno, cuya experiencia internacional ha sido columna vertebral en la destacada campaña del conjunto blanco. La contundencia del triunfo les otorgó un respiro, aunque saben que las últimas 90 minutos prometen resultar un examen de temple y estrategia.
La hinchada de Manizales aguarda expectante, consciente de que el club, tras superar escollos como Huracán y San Antonio Bulo Bulo, está a un paso de escalar a la élite continental. La memoria colectiva rememora con añoranza sus gestas en torneos internacionales, y hoy un viento nuevo sopla en el Palogrande para escribir una página renovada de gloria.
Independiente del Valle, por su parte, no piensa entregar la batalla sin presentar combate: con una ofensiva aguerrida y talento joven buscarán voltear la llave, aunque la tarea se presenta titánica tras la derrota en casa.
“El objetivo es claro: clasificar para orgullo de nuestra ciudad y el club. Aquí se ha trabajado pensando en este momento desde el primer día de temporada,” confesó un allegado al club horas antes del encuentro.
Esta noche, en Manizales, el fútbol dialogará con la historia y la ilusión. ¿Podrá Once Caldas retener su ventaja y romper el silencio en semifinales? La respuesta se escribirá con cada pase, cada grito y cada latido en el Palogrande.


