El pasado jueves, 9 de noviembre, el ministro de Comunicaciones de Israel, Shlomo Kahri, hizo público un comunicado dirigido a los medios de comunicación CNN y The New York Times, y a las agencias de noticias AP y Reuters en el que les exige entregar información sobre posibles colaboraciones de sus periodistas con Hamás.
Considerablemente, los implicados rechazaron las implicaciones de estas palabras, provenientes de una autoridad oficial israelí. De acuerdo con el ministro Kahri, “recibimos reportes de un supuesto involucramiento de sus empleados en los eventos ocurridos al sur de Israel, donde Hamás cometió una masacre”.
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El portal de verificación Honest Reporting, que se dedica a exigir a los medios de comunicación la corrección de artículos periodísticos que utilicen formas textuales que “se alinean” con prejuicios ideológicos en contra de Israel, realizó este informe que habría señalado a los cuatro portales de noticias mencionados.
En este informe, Honest Reporting señaló que “el 7 de octubre, los terroristas de Hamás no fueron los únicos que documentaron los crímenes de guerra”, pues también estuvieron presentes fotoperiodistas, lo que, según ellos, “plantea serias cuestiones éticas”. El portal realizó, además, las siguientes inquietudes: “¿Es concebible suponer que «periodistas» aparecieron por casualidad temprano en la mañana en la frontera sin coordinación previa con los terroristas? ¿O eran parte del plan?”
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Los cuatro medios defendieron el trabajo de los periodistas freelance que cubren los eventos de la guerra y su importancia para documentar todo lo que allí ocurre. Sin embargo, CNN y Associated Press (AP) comunicaron no continuar el contrato de uno de estos reporteros gráficos en Gaza. Reuters, por otro lado, añadió que estas acusaciones generan riesgos en los periodistas asentados en la región.
“Este es un intento deliberado de desviarnos de las cuestiones reales que planteamos”, respondió Honest Reporting, que agregó que “el verdadero peligro para la vida no es para los periodistas sino para los israelíes y judíos de todo el mundo”.
De acuerdo con el Comité para la Protección de Periodistas (CPJ), a corte de este martes 14 de noviembre, 42 periodistas han sido asesinados desde que comenzó la guerra el 7 de octubre. 37 de ellos eran palestinos, y las Fuerzas de Defensa de Israel aseguraron no poder garantizar su seguridad.
