
Tras dos días de debate, la reforma tributaria fue aprobada en las plenarias del Senado y la Cámara de Representantes, con pequeñas modificaciones y 16 artículos nuevos avalados por el Gobierno. Se espera que para el martes 8 de noviembre, se dé la conciliación entre ambas partes, para que el texto final pueda pasar a la etapa de sanción presidencial y convertirse en ley de la república.
La firma internacional de consultoría, impuestos y auditoría EY, señaló que las grandes discusiones y modificaciones se dieron con base en los alimentos ultraprocesados y bebidas azucaradas; además, se aprobó el artículo que no permite la no deducibilidad de regalías, mientras que con la tarifa de renta, se mantuvo la sobretasa para el sector financiero, la minería, los hidrocarburos e hidroeléctricas.
La consultora informó que el texto final se tendrá cuando se dé la conciliación en el Congreso y que éste “será el documento final para analizar para las compañías”.
El ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo, envió el siguiente mensaje al sector privado: “pese a las críticas que hemos recibido de ellos, este gobierno quiere trabajar con el sector privado, incluyendo al sector petrolero, que estará contribuyendo más”.