
Una fuerte polémica se desató entre el Gobierno Nacional y la Asociación Colombiana de Empresas de Medicina Integral (Acemi), debido a la deuda de $2.6 billones acumulados en los últimos dos años por Presupuestos Máximos. El gremio de las EPS asegura que, en ese periodo, no han recibido el pago por las atenciones de salud que no están incluidas en el Plan Básico de Salud.
Los cálculos de Acemi, aseguran que la deuda para el 2021 fue de 1.4 billones de pesos, y la de 2022 se fijó en 1.2 billones de pesos, equivalentes a un acumulado de 2.6 billones de pesos, además, de otras deudas que quedaron en el año 2020 por Presupuestos Máximos, por un total de 356 mil millones de pesos.
El sistema tiembla debido a que la falta de pago de las deudas mencionadas anteriormente, pone en riesgo la situación financiera de las EPS y las llevaría a enfrentarse a insolvencias, intervención y liquidación.
“Lo que estamos pidiendo es la mayor brevedad con los pagos. Esos recursos son importantes para pagarle a proveedores y prestadores. Ese dinero es cerca del 86% de las carteras de las EPS afiliadas a Acemi a más de 60 días, por eso el pago de la deuda generaría un alivio muy importante para el sector salud”, aseguró Paula Acosta, presidenta de Acemi, a medios nacionales.
Por otro lado, la ministra de Salud, Carolina Corcho, argumenta el por qué es necesaria la reforma al sistema de salud que rige hoy en Colombia, señalando que “entre las EPS liquidadas y en liquidación quedaron debiendo 33 billones de pesos a clínicas y hospitales, y la deuda actual es de 16,6 billones, casi 50 billones de pesos es el hueco fiscal con entidades que atienden a los pacientes”.