¿Un milagro o un error millonario en San Luis?
Una transferencia inesperada, una rapidez insólita y un giro que desvela mucho más que cifras.
Villa Mercedes, San Luis, mayo de 2025. Verónica Alejandra Acosta, mujer de condiciones humildes, recibió por error una suma cercana a 510 millones de pesos argentinos, un monto que parece sacado de una ficción y que equivaldría a 1.840 millones de pesos colombianos.
Todo comenzó con una transferencia errónea del Gobierno provincial destinada a cubrir una modesta cuota alimentaria de 8.000 pesos argentinos, un dinero esperado con urgencia por Acosta para mantener su hogar y sustento básico. Pero la cifra equivocada no fue menor: el funcionario cometió un desliz administrativo que consignó la astronómica suma en su cuenta personal.
En el lapso de menos de 24 horas, Verónica transformó este «milagro involuntario» en una serie de acciones frenéticas y necesarias: desde la adquisición de electrodomésticos como una heladera, dos televisores, microondas y una freidora, hasta la remodelación parcial de su vivienda con cerámicos y hasta la compra de un Chevrolet Celta. Además, no dejó de asistir a familiares con el dinero recibido, creando una red de ayuda inmediata. En una entrevista a la radio local FM Latina, Acosta explicó que algunos objetos adquiridos ya fueron devueltos y otras compras fueron repartidas entre sus allegados.
Sin embargo, la historia pronto cambió de tono cuando el tesorero provincial detectó el error y alertó a las autoridades y al banco. La cuenta fue congelada y comenzó una investigación judicial que logró recuperar cerca del 90% del monto original. Aun así, cerca de 44 millones de pesos argentinos permanecían irrecuperables cuando se inició el proceso. Las instituciones, en respuesta, imputaron a Verónica y cinco familiares cercanos por cargos que incluyen estafa, defraudación y retención indebida.
La jueza de garantías, asumiendo la delicadeza del caso, ordenó que cada implicado pagara una fianza de 5 millones de pesos argentinos, un gesto que busca dar seguridad a un proceso aún lleno de incógnitas y tensiones.
Más allá de las cifras, este episodio plantea interrogantes profundos: ¿Qué sucede cuando un error burocrático destapa las desigualdades y urgencias reales de quienes lo reciben? ¿Hasta dónde puede juzgar un sistema que no prevé la vida detrás de un número? En Villa Mercedes, la justicia se instala mientras el eco de la transferencia resuena con misterios y cuestionamientos que aún quedan por esclarecer.