📸 Imagen cortesía Alcaldía de Medellín
¿Medellín, la nueva joya del turismo sudamericano?
Un reconocimiento que habla por sí solo.
Este abril de 2025, Medellín recibió un galardón que por primera vez la corona como la Mejor Oficina de Promoción Turística de Sudamérica. Fue en la ceremonia de los World Travel Awards (WTA), conocidos como los ‘Óscar’ del turismo, donde el Greater Medellín Convention & Visitors Bureau –la entidad que articula esfuerzos entre sector público y privado– alzó el trofeo que marca un hito para la capital antioqueña.
Este premio no llega por casualidad. Tras más de veinte años de trabajo institucional constante, Medellín irrumpe con fuerza en la escena global, mostrando que su apuesta no es solo el turismo vacacional, sino la consolidación como un epicentro de convenciones y eventos internacionales. “Este premio reafirma que Medellín está lista para competir con las grandes capitales de la región”, afirmó Juliana Cardona Quirós, directora ejecutiva del Bureau, con la voz de quien sabe que el merecimiento vino con esfuerzo y visión.
Los datos avalan esta dirección: en los primeros seis meses de 2025, casi un millón de turistas pisaron suelo antioqueño, superando en más de un 12% las cifras del año anterior, con un salto parecido en visitantes extranjeros. Estados Unidos aparece como el principal mercado emisor, inyectando vida y movimiento a las calles y hoteles de Medellín, con un 32% del total de turistas internacionales.
Pero más allá de los números, lo que este reconocimiento visibiliza es la fuerza de un modelo colaborativo que ha sabido fortalecer la imagen y la competitividad de la ciudad ante destinos con historiales mucho más extensos. Ya con otros galardones recientes en el bolsillo —como Mejor Destino de Escapada, Turismo de Reuniones y Destino Emergente—, Medellín pareciera haber encontrado la fórmula para trascender y destacar entre gigantes.
Queda por ver si este impulso se traduce en un crecimiento sostenible que reparta sus beneficios en toda la ciudad; si la apuesta turística se conjuga con políticas sociales que mitiguen brechas y desigualdades históricas. Por ahora, el brillo de este premio ilumina un camino ascendente y abre preguntas sobre el futuro de una ciudad que se reinventa y conquista, paso a paso, su lugar en el mapa global. ¿Está Medellín preparada para sostener su nuevo protagonismo sin perder de vista a los suyos? La respuesta, como siempre, se escribe en la siguiente temporada.