Foto: Gobernación de Córdoba (@GobCordoba_)
El incidente en el que se evidenció cómo personas armadas que, aparentemente, serían miembros del Ejército de Colombia vestidos como guerrilleros y que se habrían identificado como integrantes del frente número 5 de las Farc, llevó a que los altos mandos de las Fuerzas Militares los retiraran temporalmente de la institución.
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Así lo confirmó el comandante del Ejército, Luis Mauricio Ospina, a través de una rueda de prensa. “Respecto a estas diez personas, he tomado la decisión de retirarles la confianza y responsabilidad de portar las armas de la República y, adicionalmente, para los mandos, separarlos de la unidad militar”.
La investigación respectiva contra los militares que habrían amenazado y amedrentado a los campesinos de la vereda Bocas del Manso, en Tierralta, Córdoba, la llevarán la Justicia Penal Militar y la Procuraduría General de la Nación.
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Se conoció que los diez integrantes inhabilitados por esta investigación serían un teniente, dos suboficiales y siete soldados. “Lo ocurrido no hace parte de la educación que se les imparte a los integrantes del Ejército Nacional en las escuelas de formación, capacitación y entrenamiento”, sentenció Ospina.
Por otro lado, el gobernador de Córdoba, Orlando Benítez, denunció amenazas y ataques armados contra el helicóptero que llegaba a Tierralta con miembros de la Procuraduría y la Fiscalía que se dirigían a investigar. En la zona hace presencia el Clan del Golfo, aclaró el mandatario a la par que la misma Fiscalía General. Este ataque aún no se ha atribuido a ningún grupo ilegal reconocido.
