Nueva York registra lluvias récord y graves inundaciones paralizan la ciudad: dos personas murieron

📸 Cortesía: D.R.A.
¡Qué lluvia de tragedia!

Este jueves 30 de octubre de 2025, una tormenta histórica desató caos en Nueva York. Mientras Colombia ya vivía la noche del jueves, la ciudad estadounidense se sumergía en un récord de precipitaciones que dejó un saldo trágico: dos vidas perdidas y cientos de afectados entre inundaciones y colapsos.

Las lluvias comenzaron en la tarde y no dieron tregua. Calles se convirtieron en ríos turbulentos. Barrios como Brooklyn y Manhattan quedaron bajo el agua, con sótanos anegados y transporte paralizado. Central Park marcó un dato sin precedentes: 1,80 pulgadas de agua en solo una hora, superando récords desde 1917. Y el viento, con ráfagas de hasta 85 km/h, empeoró la situación. El alcalde Eric Adams calificó la tormenta como un fenómeno que “batió récords” porque la mayoría del aguacero cayó en apenas diez minutos.

La emergencia cobró dos vidas. En Brooklyn, un hombre de 39 años murió intentando salvar a sus perros atrapados en un sótano inundado; el FDNY recuperó su cuerpo. En Manhattan, otro hombre de 43 años fue hallado sin vida en la sala de calderas de un edificio en Washington Heights. Este escenario se vuelve letal con rapidez: el gobierno local advirtió que sótanos y viviendas bajo nivel pueden convertirse en trampas mortales en minutos. La vulnerabilidad toma rostro cuando se sabe que cientos de neoyorquinos habitan esos espacios.

Esta tormenta no solo revela la fuerza de la naturaleza, sino un sistema urbano que queda expuesto a su fragilidad. La infraestructura colapsa, el transporte se detiene, la vida cotidiana se paraliza. ¿Estamos preparados para estos embates? La ciudad y sus habitantes enfrentan ahora la difícil tarea de reflexionar y reconstruir, mientras las aguas bajan lentamente, pero el recuerdo de esta noche resuena como un llamado urgente.

¿Podrá Nueva York aprender de esta tormenta para evitar que el agua arrastre más vidas en el futuro? La incertidumbre permanece, como el eco de la lluvia en sus calles mojadas.

Comparte en tus redes sociales

Facebook
X
WhatsApp