OMS reporta avances en control del tabaco, pero advierte rezago en países de bajos ingresos

¿TABACO BAJO CONTROL? UN INFORME CON LUCES Y SOMBRAS
En la encrucijada entre el avance y la espera.

Dublín, 23 de junio de 2025. La Organización Mundial de la Salud (OMS) presentó su último informe sobre el control global del tabaco durante la Conferencia Mundial que se celebra en esta ciudad. Más de 6.100 millones de personas —casi el 75 % de la población mundial— hoy cuentan con alguna protección basada en el paquete MPOWER, un conjunto de seis estrategias diseñadas para reducir el consumo de tabaco. Estas medidas van desde la prohibición total de la publicidad y el empaquetado con advertencias gráficas hasta ambientes 100 % libres de humo y la subida de impuestos al tabaco.

Los datos parecen alentadores: 155 países han adoptado al menos una de las medidas desde 2007, un salto impresionante frente a los poco más de mil millones de personas protegidas en aquel entonces. Además, cuatro países —Brasil, Mauricio, Países Bajos y Turquía— han implementado el paquete completo con resultados visibles, mientras que otros siete, entre ellos España, México e Irlanda, se encuentran a un paso de alcanzar lo que se considera el máximo control sobre el tabaco.

Pero detrás de esta aparente consolidación asoma una preocupación latente. El director general de la OMS, Dr. Tedros Adhanom Ghebreyesus, subrayó al presentar el informe que, pese a las victorias, persisten «importantes lagunas» en la protección global. Son 40 países los que no presentan ninguna medida del paquete MPOWER a nivel de mejores prácticas, y en más de 30 naciones sigue siendo posible adquirir cigarrillos sin las advertencias sanitarias obligatorias que se han reconocido como efectivas.

El contraste entre progreso y rezago invita a pensar en las múltiples causas: desigualdad económica, falta de voluntad política local y la persistencia de intereses que dilatan la plena implementación de políticas públicas eficaces. Este contexto cobra especial relevancia en los países de ingresos bajos y medianos, donde la protección aún es insuficiente y el consumo de tabaco representa un desafío creciente para la salud pública.

La pregunta permanece: ¿Logrará la comunidad internacional, encabezada por la OMS, cerrar estas brechas para que la mayoría no solo cuente con promesas sino con realidades contundentes en la lucha contra el tabaquismo? La ciudadanía global observa, mientras el humo del tabaco aún nublar la esperanza de un control pleno.

Comparte en tus redes sociales

0 0 Votos
Puntua este contenido
Suscribir
Notificar de
guest
0 Comentarios
Más antiguo
Lo más nuevo Más votado
Comentarios en línea
Ver todos los comentarios