La reacción de las disidencias de las Farc a las declaraciones del gobernador de Santander, Juvenal Díaz, donde manifestó que este grupo guerrillero solo quiere extorsionar a los comerciantes, palmicultores y campesinos de la región, fue de ordenar un plan pistola contra los policías, donde indicaron en un panfleto que circula en Puerto Wilches y sus alrededores «policía muerto, policía pago».
Las amenazas provienen de alias ‘El Paisa’, presunto cabecilla del bloque 24 de las Farc, quien también manifestó que se declara objetivo militar a los miembros del Clan del Golfo, las Autodefensas Gaitanistas de Colombia y sus colaboradores.
Por este panfleto que circula en Santander, las autoridades realizaron un consejo de seguridad extraordinario para evaluar la situación de seguridad en este municipio y sus alrededores, donde le solicitan al gobierno nacional que evalúen el proceso de verificación del proceso de paz con este grupo guerrillero, ya que consideran que esto es una violación al cese de hostilidades.