¿Motociclistas en riesgo? Un drama que no cesa en Colombia
Una sombra se extiende sobre las carreteras colombianas.
Este domingo 8 de junio de 2025, el país enfrenta una cifra alarmante: 70 muertes de motociclistas en lo que va del año, un reflejo doloroso de una realidad que golpea familias y desafía la capacidad de las autoridades para detener esta tragedia.
La mañana del pasado sábado 7 de junio, en el intercambiador El Palenque, sobre la vía que enlaza El Rincón de Girón con El Palenque, en Santander, un hombre fue gravemente herido tras ser arrollado por un camión tipo turbo. Quedó atrapado bajo las llantas traseras del vehículo; sólo la rápida ayuda de transeúntes evitó un desenlace fatal inmediato, para ser trasladado en estado crítico a un centro médico. El accidente cerró la vía por varios minutos y generó congestión vehicular, mientras las autoridades de tránsito abren la investigación para esclarecer las causas.
Pero esta escena no es aislada. La imprudencia parece conducir la mayoría de estas tragedias: el uso del celular al volante, los “piques” ilegales, conducir bajo efectos del alcohol o la fatiga, son los detonantes más frecuentes. En la autopista Medellín-Bogotá, apenas días antes, un accidente protagonizado por una motocicleta cobró la vida de tres personas, incluyendo un menor de edad y el conductor, según las primeras hipótesis. Una vez más, la falta de atención y el exceso de confianza se cobran vidas.
La urgencia cobra voz en testimonios como el de un joven motociclista que narró su propio accidente, provocado por un microsueño a 80 km/h en la vía Juncal-Neiva. Esa experiencia, relatada con estremecimiento, es un llamado a no subestimar el desgaste físico y emocional detrás del volante.
La realidad se impone con crueldad: cada número es una historia, una familia devastada. Las calles claman por una conciencia renovada y acciones concretas que detengan esta sangría. ¿Podrán las autoridades y la sociedad responder a tiempo ante esta creciente ola de accidentalidad vial?
