La Reina Isabel II había sido puesta bajo supervisión médica en su residencia de Balmoral.
John Kirby, portavoz de seguridad nacional de la Casa Blanca en Estados Unidos, afirmó que: “Sus pensamientos y los de la primera dama están hoy firme y plenamente con la reina y su familia”.
De acuerdo a un comunicado, «Tras una evaluación mayor esta mañana, los doctores de la reina están preocupados por la salud de Su Majestad y han recomendado que permanezca bajo supervisión médica».
La salud de la reina ha sido muy analizada en el último año, y ha realizado varias visitas al hospital de manera ambulatoria. También ha presentado “problemas de movilidad episódicos” desde el otoño anterior.
Su última aparición pública fue el pasado martes, mientras recibía al ministro saliente Boris Johnson y a la nueva primera ministra Liz Truss.
Más de 100 personas se reunieron frente al Palacio de Buckingham tras conocer el estado de salud de la Reina.
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