Foto: Cámara de Representantes
Una de las principales funciones que tienen los congresistas que son electos cada cuatro años por los colombianos es el control político de las instituciones y funcionarios del Gobierno Nacional, además de la principal, que es legislar.
Una de las herramientas que los congresistas pueden utilizar para formalizar el control político sobre uno o más ministros del Gobierno es la moción de censura. De acuerdo con el reglamente del Congreso, esta se define como “el acto mediante el cual el Congreso en pleno, y por mayoría absoluta, reprocha la actuación de uno o varios ministros del Despacho dando lugar a la separación de su cargo”.
Esta figura es comúnmente utilizada por los miembros de las cámaras legislativas. Solo en la última semana fueron citados a moción de censura dos ministros del Gobierno Petro: el de Salud, Guillermo Jaramillo, y el de Defensa, Iván Velásquez.
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Cuando se entabla un debate de moción de censura, “los proponentes deberán indicar con precisión los asuntos oficiales en que se fundamenta la iniciativa, para efecto de constituir los fundamentos de la proposición de moción de censura que servirá de base para adelantar el debate”.
Hasta la fecha, ningún ministro ha salido de su cartera como consecuencia de la aprobación de una moción de censura en su contra. Sin embargo, cuando la crítica política y popular cae sobre ellos por falencias en el desarrollo de sus funciones, suelen renunciar a sus cargos, o son apartados por el presidente.