El uso de jabones antibacteriales de uso cosmético puede ser beneficioso en ciertas situaciones, pero es importante utilizarlos de manera adecuada para garantizar que sean efectivos y seguros.
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Algunas recomendaciones:
– Verifica que el producto cuente con Notificación Sanitaria Obligatoria vigente en su etiqueta.
– Al tratarse de un producto cosmético es importante tener en cuenta que en su etiqueta o rótulo no pueden indicarse cualidades que correspondan a productos farmacéuticos de mayor nivel como, por ejemplo: “antiséptico”, “poder virucida”; o “desinfección de manos”, ya que de ser así se trataría de un medicamento y su uso es diferente.
– Puede conseguir en el mercado jabones cosméticos con refuerzo de un agente antibacterial, no obstante, tenga en cuenta que el jabón tradicional contiene ingredientes con capacidad para eliminar bacterias.
– Es recomendable comprar jabones suaves, cremosos y diseñados para proteger la barrera natural de tu piel.
– Tenga en cuenta que algunos jabones, suelen contener ingredientes como perfume y alcohol que resecan la piel sensible, por eso si su piel se irrita con facilidad, lo ideal es evitarlos totalmente.
– Es importante lavar muy bien y con abundante agua las manos, para eliminar la totalidad de residuos o restos de estos ingredientes que causan resequedad.
– Si tiene piel sensible, seleccione productos diseñados para ese tipo de piel, generalmente estos indican que son “hipoalergénicos” o “para piel sensible”.
– Después de cada lavado, proteja la piel, humectándola con cremas o aceites emolientes.
– Ante cualquier reacción de sensibilidad o irritación en la piel, suspenda el uso del producto y consulte a su médico.
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Es importante recordar que, en general, el lavado adecuado de manos con agua y jabón regular es suficiente para eliminar la mayoría de los gérmenes y bacterias. Los jabones antibacteriales de uso cosmético pueden ser útiles en ciertas situaciones, pero su uso debe ser moderado y selectivo para evitar problemas de resistencia bacteriana y sequedad de la piel.
