Cortesía: Senado de la República
¿REFORMA LABORAL A CONTRARRELOJ?
Este jueves 12 de junio, el Senado de la República de Colombia se sumerge en una sesión decisiva para su calendario legislativo y para el futuro del trabajo en el país. El debate sobre la reforma laboral llega a su recta final, luego de superar tres de los cuatro debates requeridos, con una fecha límite impostergable: el 20 de junio, cuando culmina el periodo ordinario del Congreso.
La reforma, promovida por el Gobierno del presidente Gustavo Petro, no es un simple cambio normativo: busca transformar de raíz el régimen de contratación y las condiciones laborales, con un énfasis claro en la formalización del empleo. Entre sus propuestas más controversiales destacan la modificación del inicio del recargo nocturno, que finalmente quedó en las 7:00 p.m., y la regulación del trabajo por horas, aspecto que ha sido duramente cuestionado por su posible impacto en los derechos laborales adquiridos.
Este impulso choca con un escenario político cargado de tensiones y contradicciones. Desde el Ejecutivo se ha dejado claro que, de aprobarse la reforma, se derogaría el decreto que convoca una consulta popular sobre temas laborales y de salud, un mecanismo que hasta ahora ha encontrado varios obstáculos en el Congreso. En medio de este reto, la senadora Angélica Lozano, presidenta de la Comisión Cuarta, expresó con esperanza que “el Senado va a sacar una buena reforma laboral. Será a tiempo, justa e incluyente”. No obstante, admitió que la conciliación de las distintas versiones presentadas será el desafío más complejo en esta etapa final.
La tramitación de esta reforma ha sido un proceso marcado por constantes ajustes, audiencias públicas y la presión constante del Ejecutivo por lograr un consenso. El Gobierno busca convertir esta reforma en una bandera social representativa de su gestión, pero las críticas no cejan, y voces en diversos sectores advierten sobre posibles retrocesos en los derechos laborales a raíz de algunos puntos aún pendulares.
Mientras el reloj avanza hacia el 20 de junio, la incertidumbre persiste: ¿logrará el Senado conciliar intereses y aprobar una norma que articule justicia laboral y protección real para los trabajadores? La ciudadanía observa con atención, consciente de que esta decisión marcará el pulso del trabajo formal y la dignidad laboral en Colombia por los años venideros.
