Foto: Presidencia de España
El pasado miércoles 24 de abril, el presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, publicó una carta a la ciudadanía dando a entender una posible renuncia a su cargo. Tras cinco días de cancelar su agenda pública para “pensarlo”, Sánchez anunció este lunes 29 de abril que se quedará en el cargo.
La decisión del presidente de poner en duda su continuidad presidencial la semana pasada estuvo motivada por una sospechosa denuncia en contra de su esposa, Begoña Gómez, por los presuntos delitos de tráfico de influencias y corrupción en los negocios. Esta denuncia, sin embargo, ya fue desestimada judicialmente por fiscales de Madrid.
Sánchez aseguró que este evento en su vida política significará un punto y aparte durante su gobierno. “Esto nada tiene que ver con el legítimo debate entre opciones políticas. Tiene que ver con las reglas de juego. Si consentimos que los bulos deliberados dirijan el debate político la consecuencia será que habremos hecho un daño irreparable a nuestra democracia”, aseguró en su declaratoria de este lunes.
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Las denuncias en contra de su esposa, según señaló Sánchez en la carta abierta de la semana pasada, fueron alentadas por los parlamentarios Alberto Núñez Feijóo y Santiago Abascal, firmes opositores del mandatario. Esto, el presidente lo denunció como una persecución ultraderechista y ultraconservadora en su contra.