Las redes sociales estallaron con indignación y burlas después de que capturas de pantalla revelaran los supuestos intentos de una influencer mexicana por obtener una remodelación completa de la casa de sus padres a cambio de una sola publicación. La presunta influencer habría solicitado la asombrosa suma de 160.000 pesos mexicanos, equivalente a más de 36 millones de pesos colombianos, para promocionar los servicios de una empresa de arquitectos.
En el intercambio de mensajes, la autodenominada influencer argumentó que su tarifa se basaba en el número de seguidores que tenía en redes sociales, afirmando poseer 100 mil seguidores en Instagram y 90 mil en TikTok. Esta justificación no impidió que la comunidad virtual respondiera con sarcasmo y críticas, cuestionando la ética y el sentido común detrás de su solicitud. Algunos usuarios señalaron la ironía de la situación, destacando que incluso con un número considerablemente mayor de seguidores, no considerarían hacer una demanda tan extravagante.
Última noticia
A pesar de la viralidad del incidente, el nombre de la presunta influencer no ha sido revelado oficialmente, lo que ha generado más especulaciones y comentarios sarcásticos en las redes sociales, donde algunos usuarios exigen que se haga pública su identidad para dar credibilidad al caso. Mientras tanto, la situación sirve como un recordatorio de los límites del influencer marketing y la importancia de la transparencia en las interacciones en línea.
