Tensión en Ecopetrol. De Greiff dejaría la junta.

¿Renuncia en plena tormenta?

La noche del miércoles 28 de mayo de 2025 se confirmó una noticia que sacudió los cimientos de Ecopetrol, la joya de la corona estatal colombiana. Mónica de Greiff, vicepresidente de la junta directiva, presentó su renuncia irrevocable, que tendrá efecto a partir del viernes 30 de mayo. Un hecho que marca no solo un cambio en la élite directiva, sino que trae consigo un clima de incertidumbre y cuestionamientos sobre la gestión interna.

De Greiff, abogada de sólido recorrido en el ámbito público y privado, había asumido su cargo en octubre de 2022 y recientemente adoptó una posición independiente dentro del consejo, además de presidir comités clave para la dirección estratégica de Ecopetrol. Su carta de dimisión, dirigida al presidente Gustavo Petro y divulgada por medios como Caracol Radio y Vanguardia, no escatimó en palabras de respeto. Destacó el liderazgo “inspirador” de Ricardo Roa, presidente de la petrolera, resaltando su integridad y compromiso con el país, al tiempo que expresó su deseo porque la empresa siga consolidándose como un actor energético integral y sostenible.

Sin embargo, esta renuncia no puede entenderse al margen de la atmósfera convulsa que envuelve a Ecopetrol. En el epicentro de la crisis está el contrato por 5.8 millones de dólares suscrito con la firma estadounidense Covington & Burling LLP. Lo que comenzó en agosto de 2024 como un acuerdo por 875.000 dólares para asesoría jurídica, se extendió a finales de ese año con un otrosí que amplió la cifra hasta alcanzar los 5.8 millones. Un convenio pensado para blindar al presidente Roa frente a investigaciones por presuntos malos manejos de fondos en la campaña presidencial de Gustavo Petro, particularmente ante autoridades estadounidenses.

Las repercusiones de esta operación – su legalidad y los procedimientos que la rodearon – han provocado tensiones internas y cuestionamientos públicos. La ciudadanía y analistas advierten sobre posibles maniobras para proteger intereses particulares dentro de una empresa hecha para servir al bien común. Mientras tanto, las instituciones miran con atención y expectativa, en busca de claridad en un escenario marcado por la sombra de la controversia.

La salida de Mónica de Greiff parece no ser solo la dimisión de una voz clave. Es también un reflejo del desgaste y la fragilidad que atraviesa hoy Ecopetrol. ¿Podrán las autoridades y la dirigencia recuperar la confianza y encaminar la empresa hacia la transparencia y la estabilidad? El reloj avanza y las preguntas persisten, en una historia donde lo económico se entrelaza inevitablemente con lo político y lo humano.

Comparte en tus redes sociales

0 0 Votos
Puntua este contenido
Suscribir
Notificar de
guest
0 Comentarios
Más antiguo
Lo más nuevo Más votado
Comentarios en línea
Ver todos los comentarios