En la noche de este jueves 9 de marzo se alertó a la Policía de Hamburgo, en Alemania, por un tiroteo realizado en la congregación de los Testigos de Jehová de la ciudad. Las primeras patrullas y oficiales llegaron a los cuatro minutos de haber recibido la llamada.
Según información oficial, el responsable fue un hombre de 35 años que había pertenecido a este grupo religioso hasta hace 18 meses. Sin embargo, en las indagaciones aún no se ha esclarecido el motivo del atentado, pero las autoridades descartaron que se tratara de un acto terrorista.
Además, identificaron a seis víctimas mortales: cuatro hombres y dos mujeres. El acto violento dejó a otras ocho personas heridas, entre ellas, a una mujer embarazada; el feto no sobrevivió.
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La séptima muerte registrada fue la del autor del tiroteo, quien se quitó la vida antes de ser alcanzado por los oficiales de policía. Según hicieron público, el atacante tenía permiso de porte de armas y era profesional en tiro.
También se hizo de conocimiento público que las autoridades habían recibido advertencias previas sobre la salud mental de este sujeto, pero descartaron cualquier motivo para confiscarle el arma.
La comunidad de los Testigos de Jehová ha expresado sus preocupaciones sobre el ataque y las personalidades públicas enviaron sus condolencias. Por el momento, las autoridades siguen indagando el motivo del tiroteo.
