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Policía Nacional desarticula red de tráfico de personas entre Colombia y España con ocho capturados en Sevilla
En una operación coordinada, la Policía Nacional española desarticuló este lunes 22 de diciembre una organización criminal dedicada al tráfico de personas entre Colombia y España, que dejó ocho detenidos en Sevilla, incluyendo a los principales cabecillas de la red.
La investigación, que se inició en 2024 a partir de otra indagación contra la explotación de seres humanos, estableció que al menos 22 personas ingresaron irregularmente a España afectadas por esta red criminal. Estas personas eran captadas en Colombia, principalmente hombres y mujeres en extrema necesidad, bajo la promesa de empleo en el cuidado de personas dependientes o en el sector de restauración.
Según informó la Policía, la organización con base en Sevilla gestionaba viajes con documentación falsa para ingresar como turistas a España. Tras su llegada, las víctimas debían asumir una deuda entre 4.000 y 5.000 euros, que la red lograba amortiguar mediante retenciones periódicas de sus salarios. Además, existían amenazas directas a las familias en Colombia en caso de incumplimiento en el pago, lo que conllevó el desplazamiento forzado de varias familias para evitar represalias.
“Esta estructura operaba en ambas naciones de manera muy organizada, con captadores en Colombia y lugares de explotación en Sevilla y Cádiz”, afirmó un portavoz de la Policía Nacional. Las víctimas eran ubicadas en empleos informales, y en casos específicos, la organización alquilaba documentos falsos para regularizar la situación laboral de forma irregular y beneficiarse de prestaciones sociales a nombre de terceros.
El portavoz agregó que la investigación fortalece las acciones contra el tráfico de personas, una problemática que en 2024 permitió liberar a 1.794 víctimas y capturar a 966 delincuentes relacionados en España. Colombia sigue siendo, según el Ministerio del Interior, uno de los países con mayor registro tanto de víctimas como de autores en estas redes.
Frente a esta situaciones, las autoridades hacen un llamado a la ciudadanía para denunciar irregularidades y situaciones de vulnerabilidad con el fin de desacelerar y mitigar el crecimiento de estas organizaciones que afectan la seguridad y los derechos humanos. La Policía Nacional mantiene abierta la investigación para ubicar nuevos implicados y proteger a las víctimas trasladadas desde Colombia.
