📸 Imagen cortesía upb
¿Caída fatal en la Clínica Universitaria?
Un lunes marcado por el dolor. Este 1 de septiembre de 2025, en la ciudad de Medellín, un hombre perdió la vida tras caer desde una de las torres de hospitalización de la Clínica Universitaria Bolivariana. La tragedia, inesperada y abrupta, estremeció a pacientes, médicos y visitantes que presenciaron aquel suceso en la mañana.
El paciente, cuya identidad y género permanecen en reserva por respeto a la investigación en curso, se encontraba hospitalizado cuando ocurrió el fatal accidente. El equipo médico de urgencias reaccionó de inmediato, desplegando todos los recursos posibles para salvarlo. Sin embargo, la gravedad de las heridas fue insalvable, y el hombre falleció a pesar de los esfuerzos médicos.
Este episodio desconocido en sus detalles profundos ha dejado un vacío inquietante en el hospital. La Clínica Universitaria Bolivariana emitió un comunicado expresando su solidaridad con la familia afectada y anunció la activación de protocolos psicológicos tanto para los allegados como para el personal de salud que sufrió el impacto emocional. Además, la institución aseguró plena colaboración con las autoridades para esclarecer lo ocurrido y activó medidas internas para tratar este tipo de tragedias.
La Policía Metropolitana del Valle de Aburrá lidera la investigación, dedicada a determinar si fue un accidente, un acto autoinfligido o alguna otra circunstancia. Por ahora, no existen conclusiones claras que expliquen el motivo o la mecánica exacta de la caída. “Estamos a la espera de los resultados, respetando la reserva de la información y los tiempos de la justicia”, señaló una vocera del hospital.
Este hecho pone en evidencia la fragilidad de la vida dentro de espacios donde se busca la curación. Un episodio que invita a reflexionar: ¿qué protocolos y condiciones se deben fortalecer para evitar que un lugar de salud se convierta en escenario de tragedia? Y mientras las investigaciones avanzan, queda la incertidumbre y el recuerdo de un día de septiembre que nadie en la clínica olvidará.
