Foto: Asamblea Legislativa de El Salvador
Esta fue la jugadita del Congreso de El Salvador que podría hacer que Nayib Bukele se aferre a la presidencia del país por todo el tiempo que él quiera. Y las posibilidades son altas.
Este miércoles, 1 de mayo, asumieron los miembros de la nueva legislatura de El Salvador. Se trata de 60 diputados que ya tienen una misión: ratificar una reforma a la Constitución Política que permitirá hacer reformas exprés a la Carta Magna salvadoreña.
Esta reforma fue aprobada por la Asamblea Legislativa pasada durante su último día de trabajo, promovida por Nuevas Ideas, partido del presidente Nayib Bukele, quien lleva en el poder desde 2019 y fue recientemente reelegido hasta junio de 2029.
Lo que ocurre con esta reforma es que permitirá que el Congreso apruebe en cualquier momento reformas a la Constitución, algo que, según dicta la Carta Magna, solo podía ser aprobado por una legislación siguiente.
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Lo problemático es que la actual Asamblea Legislativa cuenta con 55 de 60 diputados que responderán a Bukele hasta 2027, mientras que solo los cinco restantes pertenecen a la oposición. Así, se cumplen los tres cuartos necesarios para aprobar cualquier reforma constitucional de ser aprobada la jugadita del Congreso anterior.
No es sorpresa que el Gobierno de Bukele mueva montañas para quedarse en el poder. Para su reelección, el Tribunal Superior Electoral, puesto por él mismo, decidió que podía hacerse una excepción del artículo constitucional que prohíbe repetir Presidencia de forma inmediata.
