📸 Cortesía: Universidad Simón Bolívar
Vacunación sin pausa: Medellín responde al brote de fiebre amarilla
Este lunes 5 de mayo de 2025, Medellín se convierte en un escenario de movilización sanitaria. La reciente alza en los casos de **fiebre amarilla** en el país, que ya suma 32 muertes y más de 70 contagios, ha provocado una reacción urgente y masiva de la Alcaldía para contener esta amenaza invisible.
Desde abril y durante los próximos meses, la ciudad habilita múltiples puntos de acceso a la **vacunación gratuita contra la fiebre amarilla**, con el objetivo de proteger no solo a los habitantes locales, sino también a quienes planean viajar a regiones de riesgo como Tolima y Amazonas. La campaña ofrece desde la plaza pública hasta hospitales y centros de salud, buscando un acceso ágil y sin costo que además incluye la expedición del certificado internacional indispensable para determinados destinos.
Entre los espacios clave se encuentra la Plaza de la Libertad, cercana a la oficina de pasaportes, operativa de lunes a viernes de 9:00 a.m. a 4:00 p.m. El Centro de Salud de Guayabal se enfoca en viajeros con documentación y tiquetes o reservas en mano. También destaca Servicios Inmunológicos Previnm S.A.S., en el CC Tranvía Plaza, donde se asignan 40 fichas diarias desde las 7:30 a.m. y se exige comprobante de viaje para recibir la vacuna. La red hospitalaria de Medellín distribuye la aplicación en varias comunas, con horarios amplios durante la semana y algunos sábados por la mañana.
La vacuna, de dosis única, ofrece inmunidad de por vida para quienes tengan entre 18 meses y 59 años, siempre que no presenten contraindicaciones médicas, como los lactantes menores de 9 meses, para quienes está expresamente desaconsejada. Esta estrategia, en un horizonte de prevención, busca frenar la expansión epidemiológica y el sufrimiento que la fiebre amarilla provoca, en un país que prueba la fragilidad de sus sistemas sanitarios cuando la salud colectiva se ve amenazada.
Esta respuesta institucional, vigorosa aunque tardía para algunos, invita a reflexionar sobre las brechas en la protección preventiva y sobre cómo una ciudad como Medellín —vibrante y conectada— puede convertirse en una fortaleza contra un enemigo microscópico pero implacable. ¿Será suficiente la vacuna y la campaña para contener el brote o la fiebre seguirá dejando sombras en la salud pública nacional? El tiempo, y las cifras, darán la respuesta.
