📸 Imagen cortesía Observatorio de Derechos Humanos de Caribe Afirmativo
¿Silencio mortal en Sincelejo?
Una noche que prometía descanso se tornó en dolor colectivo. El lunes 6 de octubre de 2025, en Sincelejo, Sucre, la violencia dejó una huella profunda: fue asesinado Luis Enrique Quiñones Barragán, un joven estilista y líder comunitario de tan solo 27 años.
Luis Enrique vivía en un barrio popular de la capital sucreña, donde su trabajo como estilista alcanzaba a transformar no solo cabelleras, sino también vidas, gracias a su generosidad y compromiso con causas sociales. Sin embargo, en la oscuridad de esa noche fatídica, su vida fue arrebatada sin razón aparente. Según los informes del Observatorio de Derechos Humanos de Caribe Afirmativo, organización que ha acompañado el caso, no había antecedentes de amenazas ni conflictos personales que expliquen este violento episodio. La comunidad clama entonces por respuestas.
Caribe Afirmativo ha expresado su condena y tristeza ante este crimen, enfatizando la urgencia de una investigación oficial y efectiva que despliegue toda la verdad. Con este asesinato, la ya alarmante cifra de homicidios contra personas LGBTIQ+ en Colombia asciende a 59 en lo que va del año. “Nos duele profundamente la pérdida de Luis Enrique, un joven cuya voz y trabajo comunitario quedan ahora en el vacío”, afirmó la organización.
La pregunta persiste: ¿por qué se le arrebató la vida a un hombre cuyo único delito era vivir y servir a su comunidad? La respuesta exige no solo esclarecer este caso, sino también fortalecer las políticas de protección para que la orientación sexual o identidad de género no sean nunca motivos para la violencia en este país convulso.
Mientras Sincelejo llora a uno de sus hijos valientes, Colombia enfrenta el desafío de romper el silencio mortal que amenaza a tantas vidas. ¿Será posible que la justicia intervenga antes que otra noche se convierta en tragedia? El llamado está hecho.
