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En solo dos episodios de la nueva temporada de «House of the Dragon,» un perrito llamado Bobby ha capturado los corazones de los televidentes. Este perro, que una vez fue callejero, ahora brilla en la pantalla de Hollywood. La historia de Bobby es tan fascinante como las tramas de la serie misma. La semana pasada, Mark Stobbart, actor de «House of the Dragon,» se apresuró a aclarar en redes sociales la indignación causada por una escena en la que su personaje, Queso, parece patear al perro.
Stobbart explicó que la patada no fue real y que todo se trató de efectos de posproducción.
En la serie, Queso, un cazador de ratas contratado por Daemon Targaryen, siempre anda con su perro fiel y desgreñado. En el segundo episodio, Bobby aparece de nuevo, mostrando una actuación conmovedora al ver a su amo muerto, colgado por el rey Aegon. La desgarradora escena en la que Bobby emite un gemido al ver a Queso muerto ha generado numerosas reacciones de los espectadores, quienes han quedado impresionados por su habilidad para transmitir emociones tan profundas.
Bobby tiene un pasado difícil. Rescatado de las calles de Chipre en 2019, este perro estaba desnutrido y lleno de heridas cuando una organización benéfica lo encontró. Meses después, bajo el cuidado de Julie Tottman, una entrenadora de animales de Hollywood, la vida de Bobby cambió drásticamente. Julie lo ayudó a recuperarse y lo entrenó para el cine, preparándolo para una nueva vida. Bobby demostró ser un perro excepcionalmente talentoso y aprendió rápidamente las habilidades necesarias para actuar.
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Antes de su papel en «House of the Dragon,» Bobby fue elegido para la película de Disney «Cruella» en 2021, protagonizada por Emma Stone. Julie, quien ha entrenado a otros animales famosos como Fang, el perro de Hagrid en las películas de Harry Potter, y el gato de Hermione, encontró en Bobby un compañero leal y trabajador. Después del rodaje de «Cruella,» Bobby encontró un hogar permanente con Julie. Ella siempre ha sostenido que los animales rescatados suelen ser los más leales y amorosos, y Bobby es la prueba viviente de ello. Su historia, desde ser un perro callejero hasta convertirse en una estrella de Hollywood, es inspiradora y conmovedora.